Capítulo 8 - Salarios mínimos para los trabajadores domésticos

8.3 ¿Debería estar el personal doméstico amparado por el salario mínimo?

Muchos trabajadores domésticos de todo el mundo están excluidos de la cobertura del salario mínimo

El bajo nivel de la remuneración obedece también a que con frecuencia los trabajadores domésticos están excluidos de la legislación laboral en general y de la cobertura del salario mínimo en particular. De hecho, 22,4 millones de trabajadores domésticos (el 42,6 por ciento del total de trabajadores en el mundo) no tienen ningún tipo de protección contra los salarios indebidamente bajos y no están protegidos por un salario mínimo que pueda aplicarse al sector del trabajo doméstico.

En cierta medida, esto obedece al hecho de que viven en países que no tienen legislación sobre el salario mínimo (0,8 millones de trabajadores están afectados de este modo). Pero la mayoría de los trabajadores domésticos (21,5 millones) viven en países donde existen salarios mínimos regulados para otros trabajadores, pero no para el personal doméstico. Además, son numerosos también los trabajadores domésticos que no están efectivamente amparados por las disposiciones sobre salario mínimo debido a los altos niveles de informalidad que predominan en el sector (véase la sección 4.5).

Algo más de la mitad de los trabajadores domésticos tienen derecho al mismo salario mínimo obligatorio, o a un salario superior, que perciben los demás trabajadores en virtud de las legislaciones nacionales respectivas. Alrededor de 3,1 millones de trabajadores domésticos (5,9 por ciento del total) tienen derecho a un salario mínimo fijado por debajo del salario mínimo vigente para los demás trabajadores. Por otra parte, cuando hay varios salarios mínimos (por ejemplo, a nivel sectorial), el salario mínimo para los trabajadores domésticos tiende a ser el más bajo de todos. Incluso en los países donde se han establecido salarios mínimos, es difícil asegurar que los empleadores cumplan con las tasas salariales del sector doméstico. A menudo, los empleadores no conocen sus responsabilidades, las inspecciones de trabajo no tienen recursos suficientes y se exige la autorización de la persona cabeza de familia o del poder judicial para que los inspectores puedan visitar los hogares que emplean a personal doméstico.

Con todo, numerosos ministerios e inspecciones del trabajo han desarrollado prácticas innovadoras para sensibilizar a los empleadores tras la introducción del salario mínimo y para asegurar que estén de acuerdo en darle cumplimiento1.

Los trabajadores domésticos merecen tener una protección del salario mínimo equivalente a la de los demás trabajadores

Las disposiciones sobre el salario mínimo son instrumentos importantes para proteger a los trabajadores más vulnerables y menos remunerados (como los trabajadores domésticos) frente al pago de salarios indebidamente bajos. El establecimiento de un salario mínimo es una forma de reconocimiento de la contribución fundamental de estos trabajadores a los hogares y las sociedades, y un medio esencial para garantizar el principio de igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.

De hecho, el Convenio núm. 189 establece explícitamente que "todo Miembro deberá adoptar medidas para asegurar que los trabajadores domésticos se beneficien de un régimen de salario mínimo, allí donde ese régimen exista, y que la remuneración se establezca sin discriminación por motivo de sexo" (artículo 11). De acuerdo con esta disposición, varios países han tomado medidas para ampliar la cobertura del salario mínimo a los trabajadores domésticos (por ejemplo, Namibia, Brasil, Sudáfrica, Suiza, Estados Unidos y algunos estados de la India).

Los salarios mínimos deberían respetar el principio de igual remuneración por trabajo de igual valor

Diversos países de todo el mundo han adoptado diferentes sistemas de salario mínimo. Algunos han establecido un salario mínimo nacional, mientras que otros se han dotado de un sistema regional. Algunos establecen salarios mínimos por sector u ocupación, o usan una combinación de varios sistemas (véase el capítulo 2). Sudáfrica, por ejemplo, ha adoptado salarios mínimos por sector, región y ocupación. En el cuadro 1 que sigue se describen los aspectos generales de las prácticas adoptadas en una selección de países.

En algunos de los países que han establecido un único salario mínimo nacional, los trabajadores domésticos se benefician de la misma tasa de salario mínimo que los demás trabajadores, en consonancia con lo dispuesto en el artículo 11 del Convenio 189.

En los países que adoptan un enfoque sectorial o profesional, también es posible establecer un salario mínimo específico para el sector del trabajo doméstico, por ejemplo, a través de un consejo de salarios tripartito o por medio de la negociación colectiva. Sin embargo, cuando se fijan salarios mínimos sectoriales, es importante que se respete el principio de igual remuneración por trabajo de igual valor (véase la sección 2.4). De lo contrario, el mecanismo de fijación de salarios mínimos reforzaría directamente la infravaloración tradicional de los trabajos de cuidado, y el sistema estaría en violación de ese principio.

Cuadro 1. Síntesis de los sistemas de salarios mínimos para los trabajadores domésticos en algunos países
Incluido en el salario mínimo nacionalEnfoque gradualEnfoque sectorialCombinación de modalidades
Estados Unidos
Brasil
Argelia
Burkina Faso
Colombia
México
República de Moldova
Países Bajos
Rusia (Fed. de)
España
Turquía
Senegal
Chile
Ecuador
Portugal
Suiza
Italia
Austria
Botswana
India
Namibia
Uruguay
Zambia
Tanzanía (R.U.)
Sudáfrica (sectorial, regional y por ocupación)
Filipinas (sectorial, regional)

1 OIT: Labour inspection and other compliance mechanisms in the domestic work sector. Introductory guide. (OIT, Ginebra, 2015).