Trabajo forzoso

Francia se une al movimiento mundial de lucha contra el trabajo forzoso

Noticia | 14 de junio de 2016
El 7 de junio de 2016, Francia presentó el instrumento de ratificación del Protocolo de 2014 relativo al Convenio sobre el trabajo forzoso, 1930, convirtiéndose en el sexto país en ratificar el Convenio, tras el Reino Unido y Noruega, entre los países europeos, y Níger, Mauritania y Mali, entre los africanos.

La ratificación se ha hecho efectiva justo un año después de que el presidente François Hollande visitara la Conferencia Internacional del Trabajo. En esa oportunidad, el jefe de Estado francés firmó de propio puño el panel que se había colocado para la ocasión con motivo de la campaña de la OIT titulada “50 por la libertad”, destinada a alentar a los países a que ratificaran el Protocolo para intensificar la lucha contra el trabajo forzoso y la esclavitud moderna.

Mediante esta ratificación, Francia se compromete formalmente a aplicar este instrumento internacional, que da un nuevo impulso a la lucha contra el trabajo forzoso en todas sus formas, incluida la trata de personas, y tiene por objetivo proteger a las víctimas y garantizarles el acceso a la justicia y a una indemnización.

La OIT calcula que 21 millones de personas en todo el mundo son víctimas del trabajo forzoso, y que este genera aproximadamente 150.000 millones de dólares en ganancias ilícitas por año. Las víctimas son sometidas a explotación en diversos sectores de la economía, como la agricultura, la pesca, el trabajo doméstico, la construcción, la industria y la minería. El trabajo forzoso se manifiesta de diversas formas, que van de la explotación sexual a la servidumbre por deudas, así como la trata de personas y la esclavitud.

Tras recibir el instrumento de ratificación, el Director General de la Organización Internacional del Trabajo, Guy Ryder, declaró: "Celebro esta ratificación, que demuestra una vez más el continuo compromiso de Francia con la promoción y la aplicación de los derechos fundamentales en el trabajo. Esta voluntad se ha materializado, entre otras cosas, en el apoyo que Francia viene brindando desde el año 2000 al Programa de apoyo a la aplicación de la Declaración de la OIT sobre los principios y derechos fundamentales en el trabajo (PAMODEC). 

En el ámbito nacional, Francia ha reforzado constantemente su mecanismo legislativo e institucional para combatir todas las formas de trabajo forzoso. En 2013, adoptó un plan nacional para combatir la trata de personas y modificó el Código Penal, que ya recogía las figuras del trabajo forzoso y la trata de personas, tipificando los delitos de reducción de una persona a la esclavitud y de sumisión de personas vulnerables a condiciones de trabajo incompatibles con la dignidad humana".

Por su parte, la ministra de trabajo, empleo, formación profesional y diálogo social, Myriam El Khomri, al presentar el instrumento de ratificación, declaró: "Es para mí un gran honor y un enorme placer presentar en este día el instrumento de ratificación del Protocolo de 2014 relativo al Convenio núm. 29 sobre el trabajo forzoso. Esta ratificación es fruto del compromiso contraído en este mismo lugar, hace un año, por el Presidente de la República. 

Al ser el sexto Estado que ratifica el Protocolo, apenas dos años después de que se adoptara en la Conferencia Internacional del Trabajo, Francia ha demostrado que tiene la voluntad de desempeñar un papel central en la erradicación del trabajo forzoso, especialmente de sus formas más modernas. No podemos seguir siendo meros espectadores de prácticas que parecen de otra época pero que afectan a más de 20 millones de personas en todo el mundo. 

Con esta ratificación, Francia pretende reafirmar su profundo compromiso con las normas internacionales del trabajo, tal como han sido formuladas por su Organización. Este Protocolo adicional demuestra la capacidad de la OIT para adaptar su sistema normativo a las realidades del mundo de hoy, lo cual es digno de celebración".