En el mundo globalizado de hoy día, la migración laboral es una creciente prioridad política. Las dificultades económicas y las crisis geopolíticas generan deficiencias de trabajo decente que se traducen en movimientos migratorios diversos y en aumento. Además, está migración laboral cada vez más compleja agrava los problemas de gobernanza. Este es el motivo por el cual la Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) de este año, del 5 al 16 de junio, llevará a cabo una discusión general sobre la gobernanza de la migración laboral y la contratación equitativa. Esta discusión debería aportar una contribución importante a los debates mundiales sobre la migración.

OIT Noticias: El debate político actual sobre la migración con frecuencia se basa en errores de interpretación de la relación entre la migración, el empleo y el desarrollo. ¿De qué manera la migración laboral beneficia a los trabajadores migrantes y a sus familias, así como a sus países de origen y de destino?

La migración laboral beneficia a los trabajadores migrantes y a sus familias, en particular los que provienen de los países más pobres, gracias a un aumento considerable de sus ingresos y a la posibilidad de enviar remesas a sus países. Además, estas remesas, que en 2016 alcanzaron la cifra de 429.000 millones de dólares en los países en desarrollo, pueden ayudar a financiar la educación y la atención médica donde existen deficiencias en los países de origen. Pero los migrantes contribuyen también al desarrollo sostenible de su país de origen de otra manera, a través de las inversiones financieras y el capital humano y social que adquieren en el exterior, como nuevas competencias, ideas y conocimientos técnicos. Ellos además aportan beneficios a los países de destino al cubrir las deficiencias del mercado laboral en todos los niveles de calificación en ocupaciones y sectores clave, al pagar los impuestos y cotizar a la seguridad social a los sistemas de jubilación bajo presión en las sociedades desarrolladas que están envejeciendo.

OIT Noticias: La importancia de la buena esencial es reconocida por la Agenda 2030 y el Pacto mundial para una migración, segura, regular y ordenada de las Naciones Unidas que debería ser adoptado en 2018. ¿Puede describirnos algunas de las tendencias actuales de la migración laboral y los desafíos de gobernanza que representan, en particular para los trabajadores temporales?

La OIT estima que los trabajadores migrantes constituyen casi 73 por ciento de los 206,6 millones de migrantes en edad de trabajar (mayores de 15 años), y la creciente feminización de la migración laboral se refleja en el hecho que alrededor de 44 por ciento de todos los migrantes son mujeres. Entre los trabajadores domésticos, la proporción de mujeres supera el 73 por ciento.

Una tendencia significativa es el aumento de la migración dentro y entre las regiones del hemisferio sur. En la actualidad, la mayoría de los trabajadores migrantes (51,5 por ciento) vive en los países del Sur. En algunos de los principales corredores de migración – de Asia hacia los Estados Árabes y entre los países miembros de la ASEAN – el número de migrantes, muchos de los cuales son trabajadores migrantes, se ha triplicado desde 1990. Estas cifras demuestran que la migración por motivos de trabajo hoy día es la causa principal de la mayor parte de la migración internacional. Esta realidad, por lo tanto, debe quedar plenamente reflejada en los compromisos que los Estados miembros de las Naciones Unidas estén dispuestos a asumir con el Pacto mundial para una migración, segura, regular y ordenada que debería ser adoptado por un conferencia intergubernamental en 2018.

Si bien la migración aporta numerosas ventajas a los trabajadores migrantes y a sus familias, los trabajadores migrantes temporales, muchos de los cuales están empleados en sectores poco cualificados y mal remunerados como la agricultura, el trabajo doméstico, la construcción y la industria, son los más expuestos a los déficits de trabajo decente en términos de prácticas de contratación fraudulentas y abusivas, violaciones de sus derechos en el trabajo y desventajas salariales en comparación con los trabajadores nacionales, de desajuste de competencias y falta de protección social.

OIT Noticias: La mala gobernanza de la migración laboral entre países, en los corredores de migración y dentro de las regiones, ha tendido a aumentar el costo social y económico para los trabajadores y las empresas. ¿Cuáles políticas podrían ser puestas en práctica para proteger a los trabajadores migrantes y reducir el costo de la migración laboral?

La cuestión de los costos asociados a la migración temporal de la mano de obra poco cualificada, para los trabajadores y para las empresas, puede ser abordada a través del fortalecimiento del papel de las instituciones del mercado de trabajo y de las políticas activas del mercado laboral, a fin de asegurar que presten mayor atención a la situación de los trabajadores migrantes. Por ejemplo, esto puede hacerse a través del suministro de información confiable y precisa en el país de origen, antes de su salida, y a su llegada al país de destino, de inspecciones laborales dirigidas específicamente a sectores donde los trabajadores migrantes tienden a estar sobrerrepresentados, gracias a la asistencia de los servicios públicos de empleo para integrar mejor a los trabajadores migrantes en el mercado laboral, al aumentar la posibilidad de cambiar de empleador en el país de destino, y mejorar el acceso a los mecanismos de presentación de quejas y acciones de reparación eficaces en caso de violación de los derechos de los trabajadores. La reducción de estos costos aportaría ventajas considerables a las empresas al permitirles operar en igualdad de condiciones e incrementar la productividad. También es importante alinear las políticas nacionales de empleo con las políticas migratorias y garantizar que los ministros de trabajo desempeñen un papel determinante en su formulación, implementación y supervisión, en estrecha colaboración con los interlocutores sociales.

OIT Noticias: ¿Cuál es la importancia de la acción de la Iniciativa de la OIT para la equidad en la contratación y de los Principios generales y directivas prácticas de la OIT relativos a la contratación equitativa a este respecto?

Los costos elevados de la contratación, en términos de comisiones y de otros gastos pagados por los trabajadores, son especialmente preocupantes en algunas rutas migratorias. Las encuestas realizadas por la OIT y el Banco Mundial a los trabajadores migrantes en los países de destino y a su regreso al país de origen muestran que estas comisiones y costos pueden equivaler a casi un año del salario previsto por el trabajador. Las normas de la OIT prohíben, salvo excepciones, el cobro de cualquier comisión o costo a los trabajadores, y este principio queda reafirmado en los Principios generales y directivas prácticas de la OIT relativos a la contratación equitativa aprobados en una reunión tripartita de expertos en septiembre 2016 y adoptados por el Consejo de Administración de la OIT en noviembre 2016. Los principios y directivas de la OIT, que se basan en los derechos humanos y las normas del trabajo reconocidos internacionalmente, se aplican tanto a las contrataciones realizadas a nivel nacional como a las transfronterizas y a todos los actores (gobiernos, empleadores  intermediarios) del proceso de contratación. La OIT está trabajando para concretizar estos principios y directivas, incluso a través de la puesta en práctica de actividades de cooperación para el desarrollo en algunos corredores migratorios (p. ej. Nepal-Túnez en el marco del Programa integrado sobre contratación equitativa - FAIR).

Esto constituye una parte importante de la Iniciativa de múltiples partes para la equidad en la contratación de la OIT, que reúne a gobiernos, interlocutores sociales, instituciones internacionales y ONG y que coloca el diálogo social al centro de sus actividades. Esta iniciativa tiene el objetivo de prevenir la trata de seres humanos y del trabajo forzoso, proteger a los trabajadores, incluidos los trabajadores migrantes, de las formas abusivas y fraudulentas en los procesos de contratación y reducir el costo de la migración laboral, al enriquecer el acervo mundial de conocimientos, mejorar los enfoques normativos, promover las prácticas empresariales equitativas y empoderar y proteger a los trabajadores.

OIT Noticias: ¿Cómo se puede reforzar el diálogo social sobre migración laboral en los diversos niveles de la gobernanza de la migración?

La participación efectiva de los principales actores de la economía real a todos los niveles (local, nacional, regional e interregional) de la gobernanza de la migración de la mano de obra es esencial para garantizar una migración transfronteriza equitativa. El diálogo social sobre la migración laboral puede ser reforzado a través de una estrecha cooperación de los interlocutores sociales en el desarrollo, implementación y supervisión de las políticas nacionales relativas a la migración laboral. También es necesario que los acuerdos bilaterales entre los países de origen y de destino involucren a los interlocutores sociales en su elaboración y puesta en práctica. A este respecto, existen algunos ejemplos de buenas prácticas, por ejemplo el acuerdo Alemania-Filipinas sobre trabajadores de la salud, que integra a los sindicatos de ambos países en un comité conjunto creado en el marco del acuerdo a fin de supervisar y evaluar su aplicación. Los sindicatos en los países de origen y de destino también cooperan cada vez más a través de las fronteras para proteger mejor a los trabajadores migrantes. A nivel regional, contamos con un número de buenos ejemplos de estructuras tripartitas dentro de las comunidades económicas regionales, como el Foro de la ASEAN sobre migración laboral, una plataforma abierta a los gobiernos, los empleadores, los trabajadores y la sociedad civil para discutir los temas que afectan a los trabajadores migrantes, mujeres y hombres, en la ASEAN.