GINEBRA (OIT Noticias) – “Las inversiones en la fuerza de trabajo de la salud no son un costo. Son un motor del crecimiento inclusivo y el trabajo decente”, declaró el Director General Adjunto de la OIT, Gilbert Houngbo, en su discurso de apertura de la Reunión ministerial de alto nivel sobre empleo en el área de la salud y crecimiento económico.

La reunión de dos días, convocada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) el 14 y 15 de diciembre en Ginebra, Suiza, congregó a más de 150 participantes a fin de formular ideas innovadoras sobre cómo las inversiones en el personal de la salud a nivel mundial pueden contribuir con la realización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

La reunión concluyó con la presentación de un plan de acción de cinco años, un programa intersectorial de trabajo conjunto de la OIT, la OMS y la OCDE, que propone medidas para apoyar a los Estados miembros a poner en práctica las recomendaciones de la Comisión de alto nivel sobre empleo en la sanidad y crecimiento económico.

“Las recientes respuestas al Ébola y a otras pandemias demostraron nuevamente que los trabajadores de la salud figuran entre las personas más valientes del mundo”, señaló el Director General Adjunto de Programas Exteriores y Alianzas de la OIT. “Pero estas crisis también nos recordaron que urge invertir a nivel mundial en el personal sanitario necesario para lograr una cobertura universal de la salud, el trabajo decente y el crecimiento inclusivo de aquí a 2030”.

Doce ministros, diversos embajadores, expertos en salud, representantes de los trabajadores y de los empleadores del sector de la sanidad y muchos otros actores clave basaron sus discusiones en un plan de cinco años que la OIT, la OMS y la OCDE elaboraron para su consulta.

“Nuestra investigación ha mostrado claramente que la inversión en el empleo en la salud es lo mejor que podemos hacer”, agregó el Director General Adjunto de la OIT, Gilbert Houngbo. “Cuando está asociada con las políticas adecuadas y la asistencia técnica proporcionada por las organizaciones multilaterales, los países pueden estimular las inversiones requeridas que, a su vez, contribuirán con el crecimiento económico inclusivo y la cobertura universal de la salud”.

Las deliberaciones se centraron en la forma de traducir en acción las diez recomendaciones presentadas en el reciente informe de la Comisión. Estas recomendaciones explican cómo millones de nuevos empleos pueden ser creados en el sector de la sanidad, en particular para las mujeres y los hombres jóvenes. Además ponen de manifiesto la importancia de las inversiones en la formación y el aprendizaje permanente, la mejora de las condiciones de trabajo, el fortalecimiento de la seguridad y salud en el trabajo y el reconocimiento de los derechos de los trabajadores, para atraer y mantener a los profesionales de la salud que se necesitan en la actualidad y en el futuro.

“Para la OIT fue un privilegio contribuir con el trabajo de la Comisión de alto nivel sobre empleo en la sanidad y crecimiento económico”, dijo Gilbert Houngbo. “Los miembros de la Comisión presentaron argumentos de peso a favor del incremento de las inversiones en la fuerza de trabajo de la salud. Estas inversiones no son un costo. Son un motor del crecimiento inclusivo y el trabajo decente”.

El Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon, acogió con satisfacción el informe de la Comisión y las recomendaciones en vísperas de la reunión. Agradeció en particular a los Copresidentes – el Presidente de Francia, François Hollande, y el Presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma – así como a los Directores Generales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), quienes fungieron como vicepresidentes.

“El plan de acción es un excelente ejemplo de cómo tres instituciones pueden reunirse en alianzas en torno a cuestiones específicas a fin de apoyar a los países en sus esfuerzos dirigidos a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, indicó el Director General Adjunto de la OIT.

“Pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos del pleno apoyo de nuestros mandantes, así como del resto de la comunidad internacional, si queremos hacer realidad la aspiración universal a la paz, la buena salud y el bienestar, la igualdad de género, el trabajo decente y el crecimiento inclusivo”.