El informe analiza seis condiciones marco importantes para el desarrollo empresarial de la mujer en el país y destaca el clima propicio, así como el apoyo del gobierno y de los agentes privados en sus estrategias de soporte al mismo.

Según el documento, las condiciones que presentan una mayor debilidad se refieren al área de las compras públicas y las cadenas de valor, donde las mujeres no parecen estar participando y donde no se identifican acciones para paliar el déficit de participación femenina. El apoyo a la asociación empresarial de las mujeres continúa siendo una asignatura pendiente, por lo que se sugiere la creación de una entidad de referencia para las empresarias y emprendedoras. Otro aspecto destacado para mejora es el perfeccionamiento de los procesos de registro, particularmente mediante la habilitación de ventanillas únicas en línea o la rebaja de la carga administrativa a las empresas una vez instaladas.

El informe recomienda, entre otras acciones, comunicar y difundir las estrategias específicas para el desarrollo empresarial femenino, reforzar la educación financiera y el sistema de ayudas financieras para las mujeres, incrementar la presencia de mujeres en los puestos de liderazgo, o incorporar el tema del cuidado como factor estructural a resolver para impulsar el acceso de las mujeres al mundo empresarial.